El rol de la cultura en la traducción

¿Debe un traductor conocer sobre la cultura de los países para las cuales traduce?  Esta  es una pregunta que todo estudiante debe hacerse,  ya que al iniciar la carrera algunos desconocen que para poder traducir es necesario conocer y saber sobre la filosofía, creencias, historia y en general detalles únicos de los países para los cuales va a traducir.

En ocasiones se piensa que la traducción es algo sencillo que cualquier persona que sabe dos idiomas puede realizar pero esto no es así ya que para que una traducción tenga el mismo efecto o diga lo mismo en el idioma meta como lo tiene en el idioma original la persona que traduce debe conocer sobre la cultura de la cual viene ese documento para poder comprender adecuadamente el texto.  (Irabien, 2000)

Un ejemplo claro de que la cultura es un factor importante en las traducciones podemos encontrarlo en la traducción de la Biblia. Tal y como explicó el teórico de la traducción Eugene Nida, la expresión “cordero de Dios” no pudo ser traducida literalmente en la cultura esquimal, ya que en su cultura ni existe ni conocen la simbología de este animal, por eso se tradujo por su equivalente cultural “foca de Dios”( Vives, 2012). Como se observó en el ejemplo anterior las diferencias culturales hacen que el traductor tenga que usar distintas palabras para que el lector comprenda lo que se le quiere decir.

Como se mencionó anteriormente el conocimiento de la cultura, las costumbres, tradiciones, la literatura, la historia y la forma de pensar de los distintos países para las cuales se traduce ayuda al traductor a brindar un trabajo fiel al original. Es importante mencionar que el traductor debe ser parcial y respetar las características únicas entre culturas y buscar la mejor manera de transferir las palabras de un idioma a otro.

Finalmente el traductor se forma día con día, esta no es una profesión que se adquiere rápidamente sino que necesita de una preparación prolongada y continua. Es una carrera que necesita de varios elementos y uno de los más importantes es “el conocimiento de la propia cultura y de las culturas para la cual traduce”.  


“El traductor es un pontífice. Y ¿qué es un pontífice? En Roma era aquel que organizaba y presidía el culto a los dioses, o sea, aquel que servía “como de puente” entre una dignidad y otra. El traductor es un pontífice entre dos orillas idiomáticas.”
                                                                                              Jorge Avendaño-Inestrillas

                                                                                                                           

Comentarios

Entradas populares de este blog

Asociación Guatemalteca de Intérpretes y Traductores AGIT

Un buen Traductor debe ser autodidacta